Graffiti,
inscripción o pintura anónima realizada en paredes, un problema que nos afecta a todos como sociedad y no distingue raza ni
posición económica.
“Hoy
en día, son los adolescentes los que se tienden a identificar más con las pandillas, porque están más vulnerables a caer en
las tentaciones”, informa Yanneth Miranda, orientadora escolar y trabajadora de la Dirección de Seguridad Pública en el área del graffiti.
El
aumento de éste se debe, en parte, a que en los tiempos actuales padre y madre salen a trabajar todo el día, descuidando a
sus hijos. Lo anterior ocasiona que los niños y jóvenes, para sentirse seguros, se unan a las pandillas; éstas les brindan
protección y hacen como si fuera su hogar.
El
método más común de identificación de las pandillas es el graffiti, asegura la orientadora. “Las pandillas han cambiado
constantemente su forma de plasmar su señal de identificación”.
Problema complejo
Hay
muchas nuevas colonias donde el graffiti predomina; pero, por otra parte, hay colonias donde ya está erradicado.
En
los últimos años se han creado varios grupos para controlar el problema, de los cuales uno de los más importantes es el denominado
Graffiti Buster, que lo conforma la orientadora y su principal misión es localizar a los muchachos pandilleros para
ponerlos a hacer labor social.
También
está la Campaña Antigraffiti, encabezada por el alcalde Rodolfo Valdez, que se encarga básicamente de la restauración
de los puentes, especialmente el de la calzada Independencia, así como el de Lázaro Cárdenas y Manuel Gómez Morín.
La Dirección de
Seguridad Pública municipal señala que los jóvenes se convierten en infractores por el hecho de dañar las propiedades con
pintura líquida, raspa de agua o vinílica.
A
causa de ello, el Ayuntamiento de Mexicali puso en marcha el mencionado operativo especial, pues los puentes son algunos de
los lugares donde el graffiti es mayoritario.
Alejandro
López Garayzar, director de Obras Públicas Municipales, señaló que el operativo de borrado de todo tipo de graffiti dio inicio
el 26 de agosto de 2007.
López
Garayzar comentó que tal operativo lleva por nombre Programa de Embellecimiento de la Ciudad y se encuentra a cargo del director de Servicios Públicos Municipales, Enrique Cunningham
Ruiz.
Por
su parte, Cunningham Ruiz anunció que, dentro de estos trabajos de borrado y embellecimiento, en breve se estará terminando
la restauración de la glorieta Morelos, del Centro Histórico, que se encuentra muy afectada a consecuencia de las obras vandálicas.
La Dirección de
Obras Públicas ha designado a un equipo de ocho personas para realizar las mencionadas labores: pintar las estructuras metálicas
y las superficies de concreto.
La
orientadora escolar aclara que el problema del graffiti es muy complejo, hay grupos muy agresivos que incitan a sus miembros
a cometer delitos graves para ser acoplados en la clica.
Como
el graffiti es considerado delito no grave, con la nueva Ley de Adolescentes ellos sólo reciben una amonestación y el padre
de familia tiene el compromiso de vigilarlos, recuerda Yanneth Miranda.
Las
denuncias del público hacia la policía municipal se canalizan al número telefónico 066.
“El
mejor método para contrarrestar el graffiti es atacándolo desde adentro”, explica la orientadora, quien, por su parte,
piensa que lo más recomendable es ir a las escuelas a dar pláticas sobre la protección de los muchachos ante las pandillas.